Cuando iniciamos un proceso de selección de personal
es fácil descartar a las personas cuyos perfiles difieren de nuestro ideal. Sobre todo si has afrontado el
reclutamiento con rigor y siguiendo las pautas correctas. Lo realmente difícil es saber detectar a aquellos profesionales que parecen absolutamente perfectos para el puesto pero que en realidad serían poco adecuados.
Este tipo de candidatos suele tener
los conocimientos requeridos para el puesto pero no la actitud correcta. También se puede dar el caso de que alguno haya mentido en cuanto a su formación y habilidades pero esos son mucho más fáciles de desenmascarar. Un par de preguntas técnicas y listo, ya sabes lo que dicen: se pilla antes a un mentirosos que a un cojo.
Si quieres asegurarte de que no contratas a una persona tóxica que no sabe trabajar en equipo y que empeorará el ambiente laboral en tu empresa hay algunos indicadores que deben hacer saltar tus alarmas:
1. El candidato es muy egocéntrico
Sabemos que en una entrevista de trabajo se supone que el protagonista es el candidato y que el objetivo es conocerlo mejor pero ese no es motivo para que, durante la conversación, no surjan unos cuantos nombres más.
Si el candidato sólo habla de sí mismo ¡Cuidado! puede que estemos en frente de un egocéntrico total.
Lo lógico es que cuando hable de su pasado laboral nombre a las personas que le ayudaron a crecer profesionalmente, a aquel jefe que confió en él, el compañero del que aprendió o el cliente que le enseñó cierta lección.Una persona que está convencida de que todo lo que ha logrado en su vida a sido gracias a su grandeza como profesional seguro que aporta mucha confianza e iniciativa pero puede que
no sea bueno para trabajar en equipo y que su grado de competitividad afecte a otros empleados ¿Estás seguro de que quieres a un estrellita en tu plantilla?
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2. Destaca sus méritos sobremanera
De nuevo, debemos tener en cuenta que estamos en una entrevista y que el candidato pretende impresionarnos con sus logros. Eso está bien, para eso hemos venido pero el pilotito rojo de alerta debe encenderse
si pretende convencernos de que todos los éxitos que ha alcanzado en su vida son suyos y sólo suyos.Una cosa es que el candidato explique que lideró a un equipo hacia el éxito o que consiguió una importante cuenta para su empresa y otra muy diferente asumir que todo el mérito de forma exclusiva.
No estamos diciendo que debas buscar candidatos con falsa modestia pero sí
que estés atento a aquellos que no reconocen la labor de un equipo o las contribuciones de otros compañeros. Si obvias estas señales puede que contrates a un caradura que roba ideas o se esfuerza por obtener todo el reconocimiento de un trabajo en equipo.
3. No es capaz de reconocer sus debilidades
La pregunta ¿Cuál es tu mayor debilidad? es un clásico en los procesos de selección y la respuesta-
"Soy un perfeccionista" se ha convertido en un TOPICAZO que ningún candidato serio debería utilizar. Todos tenemos debilidades e incluso inseguridades en el trabajo (estoy segura de que ya te han venido unas cuantas a la mente mientras leías este apartado),
si el candidato al que entrevista no es capaz de realizar un ejercicio de humildad y lo único que se le ocurre decir es que es demasiado perfecto debemos empezar a sospechar.
Lo ideal sería
optar por alguien que comenta sus debilidades, es consciente de ellas y manifiesta su intención de mejorar esos aspectos. Te asegurarás de que contratas a alguien realista, dispuesto a asumir críticas constructivas y a avanzar como profesional.
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¿Ha destacado su organización y su seriedad pero llega 5 minutos tarde a la entrevista? Mala señal ¿Dice que tiene don de gentes pero no ha sabido saludar correctamente al entrar en la sala de entrevistas? desconfía, puede que hubiera tráfico y que los nervios le hayan jugado una mala pasada pero
si detectas alguna de estas incongruencias a lo largo del proceso de selección ¡Toma nota!
4. Parece que su perfil ha sido hecho a medida para ti
El candidato es absolutamente perfecto, tiene exactamente la experiencia que necesitas, domina las herramientas que pedías, habla los idiomas requeridos y
cumple con todos y cada uno de los puntos que habías plasmado en tu perfil de exigencias. Para el carro un momento y hazte una pregunta ¿No es demasiado perfecto?
No cometas el error de dejarte cegar por su perfección y asegúrate de que será un buen candidato.
Intenta determinar si todo lo que te cuenta es cierto y pon especial atención a los indicadores de los que hemos estado hablando. Si después de someterlo al proceso de selección sigues pensando que es la persona ideal ¡Enhorabuena!
¿Necesitas ayuda con tus procesos de selección?
Ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos a encontrar a los mejores candidatos y descartar a aquellos que, aunque parezcan perfectos sobre el papel, no son buenos para tu compañía.
